Algunas personas nos quieren hacer creer que es imposible enseñarle algo a un gato, pero si se le puede enseñar a venir a cenar, también se le pueden enseñar otras cosas. Puede que requiera paciencia y constancia, pero el resultado final valdrá la pena. No a muchos gatos se les ha enseñado a sentarse cuando se les ordena, pero no es imposible enseñarle este truco a tu gato. Asegúrese de que su gato esté bien despierto y un poco hambriento antes de comenzar a enseñarle esto.
Haz que se acostumbre a aceptar golosinas comestibles de tu mano, para que sepa cuándo las huele, que tienes algo en la mano para él. Elija un momento en el que el gato esté de pie. Acércate a él con la golosina y deja que huela que está en tu puño cerrado. Una vez que haya olido tu mano, muévela sobre la parte superior de su cabeza. No muy por encima de él o podría saltar para alcanzarlo. Simplemente deslice su mano sobre la parte superior de su cabeza, aproximadamente una pulgada por encima. Verá que para mantener su nariz cerca de la golosina, se sentará. Si no se sienta, empuje suavemente su espalda, justo en frente de la cola, hasta que lo haga.
Por supuesto, también debe dar comandos de voz. Diga “Siéntese” con voz firme al mismo tiempo que mueve la mano. Tan pronto como el gatito se siente, dale el premio y elógialo. Debe hacer esto varias veces durante el día para recordarle de qué se trata. No sirve de nada hacerlo una vez esta semana y luego olvidarse de todo hasta la próxima semana. Es probable que los gatos no recuerden nada de eso durante toda una semana.
Una vez que su gato se siente rápidamente para recibir su premio, puede intentar hacerlo sin premio. Sigue usando el movimiento de la mano, pero sin nada en la mano. Cuando se siente, abra la mano y muéstrele que no hay nada allí, pero aún así elógielo y acarícielo por obedecer. La próxima vez que lo hagas y él obedezca, dale una golosina, pero desteta gradualmente las golosinas. Tendrá que hacer que se siente al menos dos veces al día durante algún tiempo antes de que lo domine. Una vez que esté acostumbrado a sentarse sin una golosina, intente dar la orden sin el movimiento de la mano. Si no obedece, vuelva a usar el movimiento de la mano con la golosina por un tiempo más. De esta forma entrenarás a tu gato para que se siente y sorprenderá a tus amigos.